Escrito por: Pastor Lisvany Morales Marcelo
El tema de la gran comisión es uno del que se ha escrito en abundancia. Muchos han hecho excelentes observaciones del mismo.
El objeto de este estudio radica, no tanto en lo que debemos hacer, sino en cómo hacerlo.
Un dato antes de comenzar: Cuando Jesucristo estuvo aquí en la tierra dijo algo que era muy importante. Él lo declaró cinco veces, en cinco situaciones diferentes, de cinco maneras diferentes. Él lo hizo una vez en cada uno de los cuatro Evangelios y una vez en el libro de Los Hechos. Algunos los llaman “Las Grandes Comisiones.” Creo que son importantes porque dan luz de la misión que tenemos los cristianos mientras vivimos y andamos aquí en la tierra. Estas las encontramos en Mateo 28:19-20; Marcos 16:15; Lucas 24:47; Juan 20:21; Hechos 1:8
Desconocer la misión que Dios tiene para nosotros entre tanto estamos aquí, nos hará andar sin rumbo y sin dirección en este planeta. Muchas personas andan por la vida sin saber el propósito de Dios para ellos. Mark Twain fue quien dijo: “Los días más importantes en tu vida son:”, “El día que naces, y el día en el que averiguas para qué”. La mayoría de la gente se pasa la vida sin conocer el propósito de Dios para su vida.
Tú y yo fuimos PLANEADOS PARA AGRADAR A DIOS, HECHOS PARA LA FAMILIA DE DIOS, CREADOS PARA SER COMO CRISTO, FORMADOS PARA SERVIR A DIOS Y HECHOS PARA UNA MISIÓN.
Este último es el QUINTO propósito de Dios para tu vida. FUÍSTE HECHO PARA UNA MISIÓN. Jesús dijo a su Padre en oración: 18 Así como tú me enviaste al mundo, yo los envío al mundo. Juan 17:18 NTV
Pablo escribió, pero mi vida no vale nada para mí a menos que la use para terminar la tarea que me asignó el Señor Jesús, la tarea de contarles a otros la Buena Noticia acerca de la maravillosa gracia de Dios. Hechos 20:24 NTV
El quinto propósito de tu vida es COMPARTIR LAS BUENAS NUEVAS. Así que nuestra misión es Cumplir la misión de Jesús.
El pastor Rick Warren escribe acertadamente: “Si quiero ser como Jesús, mi vida de misión debe incluir Su vida de misión.”[1]
Jesús espera que yo continúe Su misión en el mundo. No es una sugerencia o una buena idea que a alguien se le ocurrió; ES UN MANDATO DE JESÚS.
Así que, ¿CÓMO CUMPLIR LA GRAN COMISIÓN (LA MISIÓN DE TU VIDA) EN EL TIEMPO PRESENTE?
En primer lugar: COMPARTE EL EVANGELIO CON TUS AMISTADES.
A esto le llamamos Evangelismo Relacional.
Nos pasamos la vida orando a Dios porque salve a nuestros familiares y amigos, y no hacemos nada al respecto. No nos proponemos como parte de la solución. Todo llega al lamento y a la intersección, pero NUNCA a la acción.
A Nehemías le llevó tiempo comprender la visión que Dios tenía pensada. Primero oró diciendo: «Dios mío, ayuda a los que están allí». Después dijo: «Tal vez Dios me podría usar a mí como respuesta a esa oración». Ahora por fin ora diciendo: «Dame el éxito». Observa la oración de Nehemías: «Ellos son tus siervos y tu pueblo al cual redimiste con gran despliegue de fuerza y poder. Señor, te suplico que escuches nuestra oración, pues somos tus siervos y nos complacemos en honrar tu nombre. Y te pido que a este siervo tuyo le concedas tener éxito y ganarse el favor del rey» Nehemías 1:10
WILLIAM CAREY fundador del movimiento misionero moderno dijo: «Espera de Dios grandes cosas; haz para Dios grandes cosas».
El evangelio nunca creció tanto en la historia del cristianismo como lo hizo por medio de las relaciones.
A veces se necesita ministrar en el área de las necesidades o emociones, y generalmente esto es más posible con personas con las que tienes roce cada semana. Las personas que te rodean tienen necesidades, y tú tienes la oportunidad de suplirlas y ganarte el derecho de presentarles a Jesús.
Nosotros ministramos en tres áreas de necesidad:
- A las necesidades FÍSICAS de la gente. Jesús dice: 35Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; fui forastero, y me recogisteis; 36estuve desnudo, y me cubristeis; enfermo, y me visitasteis; en la cárcel, y vinisteis a mí. Mateo 25:35, 36. RV60a
- A las necesidades EMOCIONALES de la gente. 14También os rogamos, hermanos, que amonestéis a los ociosos, que alentéis a los de poco ánimo, que sostengáis a los débiles, que seáis pacientes para con todos. 1 Tesalonicenses 5:14 NTV
- A las necesidades ESPIRITUALES de la gente. Y todo esto proviene de Dios, quien nos reconcilió consigo mismo por Cristo, y nos dio el ministerio de la reconciliación 2Cor 5:18 RV60a
Tus amistades tienen algunas de estas necesidades y Dios te ha dado la oportunidad de estar ahí para suplirlas.
Escucha esto: Las personas responderán a quienes mejor atiendan a sus necesidades.
Tú tienes la oportunidad de suplir a las carencias (físicas, emocionales o espirituales) de las personas con las que te relacionas. Dios te ha puesto cerca de ellas para que lo hagas. Al efectuarlo, responderán al evangelio de manera que no puedan resistir. Solo tienes que estar DISPONIBLE para acercarlos a Jesús.
Te animo a que seas INTENCIONAL con las personas que amas y no te aísles de ellos; sin dudas te necesitan.
Vallamos al aspecto práctico: ¿Quién te convenció de que necesitabas a Jesús?
Conozco muchos ejemplos de personas que fueron traídos a Cristo por amistades. Yo mismo fui traído al Señor por un amigo. En la mayoría de los casos alguien se relacionó contigo y te presentó a Jesús. Alguien se acercó a ti, se hizo sensible a tu necesidad y te presentó eventualmente a Jesucristo; por eso estás hoy en él y formas parte de la familia de Dios.
En la Biblia encontramos varios casos notables. Uno es el de Andrés, quien era discípulo de Juan el bautista, y fue conducido a Jesús por su propio maestro. Pero la cadena no terminó ahí. Este Andrés trajo después a su hermano Simón Pedro a Jesús, para que le conociera y recibiera como el Mesías. Leamos lo que dice la escritura: 35El siguiente día otra vez estaba Juan, y dos de sus discípulos. 36Y mirando a Jesús que andaba por allí, dijo: He aquí el Cordero de Dios. 37Le oyeron hablar los dos discípulos, y siguieron a Jesús. 38Y volviéndose Jesús, y viendo que le seguían, les dijo: ¿Qué buscáis? Ellos le dijeron: Rabí (que traducido es, Maestro), ¿dónde moras? 39Les dijo: Venid y ved. Fueron, y vieron donde moraba, y se quedaron con él aquel día; porque era como la hora décima. 40Andrés, hermano de Simón Pedro, era uno de los dos que habían oído a Juan, y habían seguido a Jesús. 41Este halló primero a su hermano Simón, y le dijo: Hemos hallado al Mesías (que traducido es, el Cristo). 42Y le trajo a Jesús. Juan 1:35-42 RV60a
La historia continua, 43 Al día siguiente, Jesús decidió ir a Galilea. Encontró a Felipe y le dijo: «Ven, sígueme». 44 Felipe era de Betsaida, el pueblo natal de Andrés y Pedro. 45 Felipe fue a buscar a Natanael y le dijo: —¡Hemos encontrado a aquel de quien Moisés y los profetas escribieron! Se llama Jesús, el hijo de José, de Nazaret. 46 —¡Nazaret! —exclamó Natanael—. ¿Acaso puede salir algo bueno de Nazaret? —Ven y compruébalo tú mismo —respondió Felipe. NTV
Reflexiona en esto: ¿Cuán a menudo compartes las Buenas Nuevas con tus amistades? ¿Hay algún ajuste que debas hacer en tu tiempo o carácter, para que tus amistades escuchen de ti el evangelio de Jesús, las maravillas del Dios vivo?
¿En qué maneras podrías hoy presentarles a Jesús a las personas con las que te relacionas semana tras semanas?
En segundo lugar: SÉ UN TESTIGO INTENCIONAL DONDE QUIERA QUE TE ENCUENTRES.
El pastor Bárbaro Abel Marrero Castellanos, rector del Seminario Teológico Bautista “Rafael. A. Ocaña” de La Habana, Cuba, y actual presidente de la Asociación Convención Bautista de Cuba Occidental, expresó muy acertadamente ante la petición del autor de ayudarle con una frase sobre la emigración: “Donde quieras que estés sé un misionero”.
Tú puedes viajar a otros países para comenzar una nueva vida, con nuevas metas, oportunidades y desafíos, pero tu identidad primaria sigue siendo la misma: “TÚ ERES UN MINISTRO DE JESUCRISTO”. Y donde quiera que estés, estarás llamado al ministerio de la reconciliación. Dios rogará por medio de ti: “Reconcíliense con Dios”.
Me encanta como lo describe el pastor Rick Warren:
NO SOY QUIEN PIENSO QUE SOY.
NO SOY QUIEN PIENSAS QUE SOY.
¡REALMENTE SOY QUIEN DIOS DICE QUE SOY!
(Y Dios dice que FUI CREADO, SALVADO Y LLAMADO PARA EL MINISTERIO)[2]
Mi identidad primaria: ¡Soy un Ministro de Jesucristo!
Eso es lo que somos y nunca va a cambiar. Así que, SÉ UN TESTIGO INTENCIONAL DONDE QUIERA QUE TE ENCUENTRES. No cambies tu identidad primaria.
El apóstol Pablo es un ejemplo de misionero que deberíamos imitar. Él viajó INTENCIONALMENTE, para presentar las Buenas Nuevas a quienes vivían en la oscuridad. Sus viajes misioneros son un testimonio de cuánto amaba él la misión de Jesús. Hablando de ella dijo: pero mi vida no vale nada para mí a menos que la use para terminar la tarea que me asignó el Señor Jesús, la tarea de contarles a otros la Buena Noticia acerca de la maravillosa gracia de Dios. Hechos 20:24 NTV
Quizás no eres un misionero a tiempo completo, pero sí eres un discípulo de Jesús. Y todos los discípulos de Jesús han sido llamados al ministerio de la reconciliación, a ser testigos del evangelio de la gracia de Dios. No se espera menos de nosotros, que cumplir con el llamado de Jesús.
Puede que seas un comerciante, empresario o un viajero común, aun así, el llamado y la orden de Jesús no ha cambiado: “ID Y HACED DISCÍPULOS A TODAS LAS NACIONES…
Reflexiona en esto: ¿Cuán a menudo has compartido las Buenas Nuevas en tus viajes? ¿En esa nueva nación en la que vives, te mantienes siendo un TESTIGO INTENSIONAL?
Si Jesús te pidiera cuentas por tu ministerio ¿Qué respuesta tendrías?
¡TE ANIMAS A CUMPLIR LA GRAN COMISIÓN EN EL TIEMPO PRESENTE!
Dios te bendiga.
[1] Tomado de la Clase 401 “Descubriendo mi misión de vida” del pastor Rick Warren.
[2] Tomado de la Clase 401 “Descubriendo mi misión de vida” del pastor Rick Warren.